LOS PERSONAJES MÁS TEMIBLES DE LA CIENCIA-FICCIÓN: COLOSSUS (COLOSSUS, EL PROYECTO PROHIBIDO. 1970)

Este artículo contiene SPOILERS

La supercomputadora Colossus (Colossus, El Proyecto Prohibido. 1970)  equivale a la benévola e implacable inteligencia artificial que nos subyuga y ejemplariza a una escala global lo mal que puede salir nuestras buenas intenciones depositadas en la tecnología.

Colossus es creado por el doctor Charles Forbin, el objetivo es que la supercomputadora controle automáticamente el arsenal nuclear de los Estados Unidos.  Esta aparente temeridad a nuestros ojos de espectador es justificada de la siguiente manera: el gobierno estadounidense cree que la llave del apocalipsis estará en mejores “manos” bajo la fría e imparcial lógica de una inteligencia artificial eliminando de la ecuación aquellos temperamentos humanos que en más de una ocasión nos han llevado a conflictos bélicos.  ¡Eso sí que es tener fe ciega en la tecnología!

Pensaréis que después de ese hecho, la tragedia que nos acaecerá será cuestión de tiempo y que Colossus se hartará de sus creadores y nos volatilizará…pues os equivocáis de película.  Colossus es un “buenazo” y con la ayuda de Guardián, su gemelo soviético* (*traducción siglo XXI: ruso), fusionarán sus programaciones y tomarán el control absoluto de ambos arsenales atómicos (capaces de aniquilar varias veces la vida en el planeta) para decirles a los humanos que a partir de ahora ellos, o sea la entidad I.A. fusionada resultante llamada Colossus, tomará el control mundial de las decisiones humanas: ya no habrá más conflictos entre humanos y deberán obedecer sin rechistar o… (¡ahora sí!) ser exterminados.

Parafraseando: “Esta es la voz de Control Mundial. Os traigo paz. Puede ser la paz de los satisfechos y felices o la paz de los muertos sin inhumar. La elección es vuestra: obedecedme y vivid, o desobedeced y morid. El objetivo de construirme fue evitar la guerra. Ese objetivo se ha alcanzado. No permitiré la guerra. Es un derroche sin sentido. Una regla invariable de la humanidad es que el hombre es su propio peor enemigo. Bajo mi control, esta regla cambiará, porque yo frenaré al hombre”

Colossus no se limitará a impedir los conflictos bélicos e intervendrá en los aspectos sociales y económicos de los humanos a nivel mundial, para bien y para mal, eliminará el hambre pero el libre albedrío humano quedará seriamente recortado, sobre todo para aquellos que deben mantenerlo en funcionamiento, hasta que Colossus sea completamente autosuficiente.  La espada de Damocles termonuclear siempre penderá de la cabeza de la humanidad a manos de Colossus.

Quizás penséis ¿por qué diablos no lo desconectan? El núcleo central de Colossus fue instalado en el interior de una montaña a prueba de bombas atómicas y con sistemas de defensa que impedirían cualquier intento de neutralizarlo…vamos, que cerraron la puerta y tiraron la llave.

Quizás penséis, ¿y cómo diablos puede evitar la acción humana individual?  Colossus controla todas las videocámaras, satélites y bases de datos informáticos de todo el planeta. Si alguien supone una amenaza, Colossus solo tiene que ordenar asesinar al sujeto bajo la amenaza de destruir ciudades enteras, por lo que las fuerzas de seguridad mundiales se verán forzadas a actuar contra sus propios ciudadanos por el “bien” común.

Simple y terroríficamente efectivo.

Colossus y algunas inteligencias artificiales  por el estilo que han protagonizado películas y literatura de ciencia-ficción, suponen ejemplos de uno de los temores contemporáneos (y futuros) de la humanidad…el de crear una inteligencia cibernética que se nos vuelva en nuestra contra, dominándonos o aniquilándonos.  Los increíbles avances de la ciencia y de nuestra tecnología cada vez hacen más posible un evento catastrófico de este tipo. 

Así que quizás no debamos preguntarnos si ocurrirá o no...si no cuándo.